miércoles, 28 de mayo de 2008

Estoy en Caracas (las fotos nada que ver)




Estamos filmando un comercial y entre filmación, post producción y etcéteras, vamos a estar una semana acá y después me voy a Miami un día y medio a corregir colores. Por eso estoy posteando poco, pero si consigo bajar las fotitos de la cámara (no me traje el cable), empiezo a subir cosas de la producción. Mientras tanto, subo una de lo mal que me fue la últim vez de una producción grande acá en Caracas.
1_ Me tuvieron que amarrar para que no atacara a las modelos. (según Katya, que fue la productora del proyecto... si yo soy un santo).
2_ Fuimos a corregir colores a Los Ángeles, como atestigua el cartelito, queríamos llegar a ver el cartel de frente, pero nos perdimos en las colinas y quedamos de costado, una parejita nos venía siguiendo, porque habían visto que teníamos mapa y nos terminaron puteando porque los llevamos mal. ¿Quién los manda a seguirnos?, si ni siquiera preguntaron.
3_ Alquilamos un auto y por quince dólares más nos dieron uno "bueno, para que estén cómodos durante su estancia acá en LA", bueno, dame este, señalé una foto... nunca me esperé que nos dieran el auto de 50 cents, gigante, negro, con el radiador así de grande y con la radio puesta en FM GANGSTA. Cada vez que se paraba un negro al lado nuestro en algún semáforo nos veia con envidia y se le hacía agua la boca de ponerle unos neones azules abajo para que pareciera que el auto vuela como una nave espacial. Yo opté por saludar a todo el mundo que lo veía con un "yo yo broda", así creían que era del palo (no me alcanzó para comprarme una gorrita de beisbol y ponérmela encasquetada hasta las orejas).

Aclaración: Si el que paraba al lado era chicano, más bien se ilusionaba con ponerle suspensión loca, de la que cuando apretás un botón salta sola y la bocina de "la cucaracha".

2 comentarios:

Anaik Frita dijo...

Por las dudas y antes que nada: si manejás vos tenés que advertirle a la gente que podés ir a buscar cualquier cosa MENOS PANQUEQUERAS

Tampax Ultra dijo...

Obviamente no manejaba yo, si no, no contaba el cuento.